En la primera mitad hubo un duelos de estilos bien marcado. Los de Florencio Varela contaron con la posesión de la pelota, buscaron lastimar al Lobo mediante la acumulación de pases y tuvieron una mejor calidad de oportunidades de gol. Por su parte, los dueños de casa fueron más directos, tuvieron son chances de adelantarse en el marcador, pero la ineficacia en la zona de fuego no les permitió sacar ventaja. 

Ya en el complemento, el partido fue por la misma tónica, pero con un conjunto platense más protagonista. De hecho, en los últimos 45 minutos los de Pipo Gorosito contaron con las chances más claras para llevarse la victoria, pero se toparon con la figura de Ezequiel Unsain en repetidas ocasiones. 

Sin embargo, a veces el fútbol hace justicia, y cuando los locales estaban en su mejor momento lograron romper el cero: al minuto 32, Tomás Muro capitalizó un despeje defectuoso de la última línea de Defensa, la controló dentro del área y ensayó una vaselina por arriba de la inmensidad del arquero del conjunto de Florencio Varela.  

No obstante, tras conseguir el gol de la victoria, los de El Bosque retrocedieron su punto de partido un par de metros y la embestida de Defensa se hizo notar. En ese preciso momento fue cuando la figura de Rodrigo Rey emergió y con diversas tapadas espectaculares mantuvo el cero en su arco, lo que permitió que Gimnasia suba a lo más alto del campeonato.