Un nuevo hecho de violencia que comenzó en la calle volvió a dejar al descubierto la locura generalizada que se vive en la sociedad, y cómo todos los problemas se resuelven ejerciendo la fuerza física.
 

Lo más llamativo del incidente es que el conflicto habría iniciado por la disputa de un lugar para estacionar. Según los testimonios recogidos por medios locales, uno de los padres agredió básicamente a una mujer, golpeándola en la cabeza mientras ella estaba en el suelo.

El episodio generó gran conmoción entre los presentes y destacó como un ejemplo de la escalada de agresividad que atraviesa la sociedad.

La violencia comenzó cuando un hombre y una mujer, abuelos de niños del establecimiento, estacionaron su auto sobre la vereda de una casa vecina, lo que desató la furia de otros padres presentes.

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La disputa rápidamente escaló, involucrando principalmente a mujeres que se agredieron esencialmente frente a los menores de edad. La Policía intervino, disparando al aire con postas antitumulto para dispersar a la multitud, aunque algunos testigos afirman que la situación era aún más violenta.

Según la denuncia de la esposa de uno de los agredidos, el vecino violento ingresó al acto con un arma y atacó a su marido a puñetazos. En medio de la pelea, el agredido también habría golpeado a una de las mujeres involucradas.

La violencia se intensificó dentro del auditorio del jardín, donde sillas y objetos volaron, y luego se trasladó a la vía pública, donde los padres enojados casi linchan al agresor, quien terminó hospitalizado. Los hechos ocurrieron ante la presencia de los niños, generando un ambiente de caos y tensión.